lunes, 7 de mayo de 2012

Remordimientos



Cuando hacemos cosas en contra de nuestra conciencia nos va quedando una huella a la que llamamos remordimiento.
A veces ocurre que nos vamos aconstumbrado a actuar de esta forma de manera que perdemos la luz llegando a no distinguir que está bien y que mal.
Con el paso de los años, es el remordimiento, el recuerdo sucio que nos queda en la memoria, el que nos lleva valorar si actuamos o no conforme a nuestra conciencia.
La conciencia es una función natural y espontánea de nuestra inteligencia que  se va formando poco a poco  cuando se empieza a conocer el mundo, a valorar y ver como hay que obrar. Se suele considerar que comienza sobre los 7 años.

No se puede imponer a nadie los criterios con violencia porque atenta al modo natural de ejercer la libertad. No podemos obligar a nadie a que obre en contra de su conciencia; sería destruir  su vida moral.

Sin embargo, el hecho es que,   tras una situación, sea cual sea y a la edad que sea, haya remordimientos constantes y dolorosos hace que pensemos en la falta de libertad que hubo a la hora de realizarlos.

Es muy díficil sentirte mal porque algo que ha sucedido en tu pasado porque en ese sentimiento va tu implicación y por lo tanto tu culpabilidad pero, si pudiesemos por un momento  ver el motor de nuestro acto al otro, entenderiamos la situación y nuestro dolor sería menor.

Al acto en si le sumamos la culpa por el descontrol. Quitada la culpa, ¿Qué queda?.




1 comentario:

Diego Belfort Burton dijo...

Muy bueno!
Por un momento sentí que me describias.
Es muy cabal y excacta la relación de preguntarnos sobre la "libertad" en el momento crítico. ¿Somos libres?
Un abrazo.

Pd.- Me gustaría me puedas facilitar tu e-mail.