Hoy me levanté, por decirlo así, envuelta en llanto. Desgarrada mi alma, sufriendo sin consuelo.
Hable con Él recomendándome que lo escribiese todo.
Las llamé a todas, mis amigas, pidiendo auxilio. Amor de Dios en forma de amistad.
Pasó el largo día. Rociadas de amor, piedras y bendiciones llego a casa.
Aquí me esperaba. Ese correo tan necesario para salvar mi vida.
Es bien extenso, iré regalando aquellas frases que más me afecten cada día.
Quiero compartir con todos esta prueba de amor igual que pude hacerlo este amanecer con mi dolor.
"Cuando la vida te presente mil razones para llorar, demuéstrale que tienes mil y una razones por las cuales sonreír”
Facundo Cabral
No hay comentarios:
Publicar un comentario